Beneficios de la jícama que debes incluir en tu dieta

Seguramente recuerdas la jícama escondida en el interior de las piñatas, ó como botana o postre, la jícama ha acompañado a los mexicanos en festejos y comidas.

Ya sea que la comas en tiras como fruta, sofrita como vegetal, guisada en sopas o en escabeches, te compartimos interesantes datos sobre esta raíz crujiente y refrescante:

La jícama ¿es fruta o verdura? 

La jícama es una planta herbácea de la familia de las leguminosas y el tubérculo que conocemos, es considerado una verdura

Su nombre proviene de la palabra náhuatl xicamatl, que significa raíz acuosa y se considera un cultivo Mesoamericano que llegó a Centroamérica, Perú y Ecuador. 

Por su apariencia y origen, también se le conoce como “nabo mexicano” y en Estados Unidos como “yambean”. Se conocen 5 especies, la más reconocida en México es la Pachyrhizus erosus.

En tanto que leguminosa es capaz de fijar el nitrógeno atmosférico, reincorporándolo al suelo y beneficiando la tierra para otros cultivos. 

Se siembra entre marzo y junio, para cosecharla entre septiembre y diciembre.

¿Qué beneficios ofrece la jícama?

Por cada 100 g de jícama, se obtienen: 1.3 g de proteína, 21 mg de vitamina C, 15 mg de calcio, 16 mg de fósforo y 90 g de agua, además de contener tiamina, riboflavina y niacina. Al tener un aporte energético bajo (55 calorías por 100 g) y ser alto en fibra, la jícama es una buena opción como colación, acompañada con chile y jugo de limón, o como parte de una ensalada.  

¿Cómo se recomienda guardarla y consumirla?

  • La jícama se consume pelada, tanto cruda como cocida. 
  • Solamente el tubérculo de la jícama es comestible ya que sus hojas, tallos, vainas y semillas contienen rotenona, sustancia con propiedades insecticidas que puede ser tóxica para el humano. 
  • Por ello, también es importante lavar la cáscara antes de pelarla y no contaminar la pulpa. 
  • Las jícamas más grandes tienen una textura más gruesa y su ligero sabor dulce será menor. 
  • Se recomienda almacenarla en un lugar frío y obscuro (que no sea en el refrigerador para evitar humedad) hasta por 4 semanas cuando aún no ha sido cortada.
  • Combina muy bien con verduras y frutas, como naranjas, manzanas, zanahorias y cebollas, al igual con carnes y mariscos. 
  • Es una excelente opción de botana saludable, con limón y chile, o como se desee.

¿Cómo elegir la mejor jícama?

Elige jícamas con cáscara lisa y que se sientan pesadas. Una buena jícama pesa entre 500 g y 1 kg. Entre más grande sea la jícama, la textura será más gruesa y el sabor dulce será menor. Recuerda que las jícamas peladas y guardadas en una bolsa resellable duran hasta dos semanas en el refrigerador. Puedes sumergirlas en agua con el jugo de 1 limón para que se mantengan frescas por más tiempo.  

La jícama y su leyenda

Una leyenda purépecha cuenta que al casarse la Luna (Xaratanga) con el Sol (Curicaueri), provocaron mucho desorden en la tierra porque se presentaban siempre juntos. Por ello, la Madre Naturaleza decidió separarlos. Antes de la separación, la Luna desprendió unas lágrimas que se sumergieron en la tierra y se cristalizaron en jícamas.