Ante la crisis por falta de agua en el estado de Nuevo León, dos mujeres se agarraron a golpes en un parque de la colonia Purísima, en el municipio de Guadalupe. La pelea nació a raíz de que un grupo de vecinos se acercó a un parque público para llenar botes de una toma de agua residual, la cual era utilizada para regar los árboles.
Ante esta situación, los colonos aseguran que la jueza de barrio actuó de manera arbitraria frente a la situación, ocasionando desacuerdo entre las vecinas, lo que provocó la pelea.
Tras dos semanas sin tener servicio de agua potable, las mujeres comenzaron a discutir, lo que derivó en golpes. Las involucradas llevaban consigo pequeños garrafones de plástico, los cuales utilizaron para golpear en la cabeza y en la cara a la otra.
Tanto los vecinos, como sus familiares, intervinieron hasta que lograron separarlas, por lo que el pleito no pasó a mayores.
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