Los familiares de Miah aseguraron que la pequeña intenta reponerse del duro trauma que significó el ataque de Ramos.
La maestra de Miah, Irma García, fue una de las dos profesoras asesinadas.
Al momento del ataque la Miah se tiró al suelo y comenzó a ver mucha sangre en el salón, fue entonces que se le ocurrió fingir estar muerta para que el atacante no le hiciera nada.
En declaraciones para el portal NBC DFW, la tía contó la historia que le platicó la niña.
Miah sacó un poco de sangre (de su amiga que estaba muerta) y se la puso para poder fingir que estaba muerta”, dijo.
Ahora Miah y su familia intentan reponerse del duro golpe que representó el ataque.