La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México descartó que el bebé que fue encontrado sin vida en los contenedores de basura del Centro de Reinserción Social de San Miguel, Puebla, haya sido sacado de algún anfiteatro, hospital o del propio Instituto de Ciencias Forenses capitalinos.
A través de un comunicado publicado en sus redes sociales, la FGJ de la Ciudad de México subrayó que no tienen denuncias o algún tipo de reportes sobre el robo del cuerpo de un menor de edad.
“Tras un rastreo en anfiteatros de la ciudad, tanto de la institución, como de hospitales y el INCIFO, no cuenta con denuncia o reporte, sobre la desaparición o sustracción de una persona menor de edad, con características del cuerpo hallado en Puebla”, se puede leer en el comunicado.
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Fue la semana pasada cuando se halló el cuerpo de un bebé sin vida en el penal de Puebla, algo que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ya investiga. Según explicaron, un interno que trabajaba en los contenedores de material de plástico reciclable, habría hallado el cuerpo cubierto con cal y dentro de una bolsa. Igualmente, se informó que el bebé contaba con una cirugía de apéndice.
La organización civil afirmó que lo sucedido en Puebla, refleja la crisis de derechos humanos que se vive actualmente en los penales de México.
Por su parte, el gobernador, Miguel Barbosa, afirmó en su momento que ya se investiga lo ocurrido en el reclusorio de San Miguel y lo calificó como un “hecho gravísimo”.
“Es un hecho gravísimo que está en proceso de investigación y he estado en contacto permanente con la Fiscalía (estatal) para conocer algunos detalles”, aseguró.
Finalmente, Barbosa Huerta subrayó que dicho asunto se tratará con la “secrecía necesaria” para evitar estropear las investigaciones correspondientes.