Científicos consiguieron trasplantar riñones de cerdo modificados a un hombre de 52 años con muerte cerebral y han logrado que sean funcionales al fabricar orina y depurar creatinina.
La investigación que está en fase de experimentación se ha publicado este miércoles en la revista JAMA Surgery, lo que supone un avance en la ciencia y en los xenotrasplantes para tratar la insuficiencia renal terminal.
“Pueden proporcionar una función renal normal y vital a un ser humano de forma segura y con un régimen de inmunosupresión estándar”, destacó la cirujana Jayme Locke.
El trasplante lleva el nombre del donante Jim Parsons, de 52 años de edad, a quien le extirparon los dos riñones para realizar el xenotrasplante compatible.
“En el tercer estudio pudimos demostrar la producción de orina en los cuatro minutos siguientes a la reperfusión de los riñes”, destacó Locke.
Además de que siguieron funcionando con normalidad como en un ser humano vivo durante los siete días que duró el estudio.