El ex papa Benedicto, falleció este sábado 31 de diciembre a los 95 años, en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde vivía desde que dejó el cargo en 2013, informó un portavoz de la Santa Sede.
Los rituales funerarios se asemejarán a los del obispo de Roma, sin que exista cónclave.
La capilla ardiente tendrá lugar este lunes 2 de enero en la basílica de San Pedro del Vaticano confirmó el Vaticano.
El funeral será el 5 de enero en la Plaza de San Pedro, mismo que presidirá el papa Francisco, de acuerdo con Matteo Bruni, director de prensa de la Santa Sede.
Protocolo
Con la muerte de un papa emérito, la diócesis actuará de acuerdo con las pautas de organización de un funeral de un pontífice en activo. Lo único diferente es que no habrá un cónclave para elegir al nuevo Papa, ya que no se trata del fallecimiento de un Papa ‘reinante’.
Esto dice el Ritual Romano
El rito litúrgico a llevar a cabo para el funeral será un luto oficial de nueve días. El funeral se llevará a cabo en la basílica de San Pedro y su cuerpo sería enterrado en la cripta debajo de la Basílica, nunca antes de cuatro días ni más allá de seis días después del fallecimiento.
Antes de que ocurra todo esto, su cuerpo se colocaría en un catafalco, una suerte de armazón cubierto con una tela negra que representa un sepulcro, para ser expuesto en la basílica de San Pedro y recibir el homenaje de los creyentes.
Los pasos a seguir después de la muerte de un papa están descritos en la Constitución ‘Universi Dominici Gregis’, aprobada por Juan Pablo II en 1996, y salvo la apertura de un cónclave y la destrucción del anillo papal, además de otros pequeños detalles, parece que poco cambiará, aunque esos matices serán importantes.
En el caso de Benedicto XVI, las disposiciones relativas a la apertura del testamento o cómo y cuándo celebrar el funera, no serán tomadas por el camarlengo, quien actúa en caso de Sede Vacante, como se conoce el periodo sin pontífice, sino directamente por Francisco.
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Funeral insólito
El funeral de Benedicto XVI estará presidido por el papa Francisco, algo insólito en la historia.
Fue en 2005 cuando se realizó el funeral del papa Juan Pablo II que tuvo largas filas.
Benedicto XVI, quien tenía como nombre de pila Joseph Aloisius Ratzinger, sorprendió al mundo cuando anunció su retiro en 2013, creando nuevas ‘jugadas’ para el papado reinante y retirado.
Será enterrado en la cripta de la Basílica de San Pedro. La única voluntad expresa de Ratzinger es ser enterrado en el nicho de la cripta de la Basílica de San Pedro
Se prevé que el papa Francisco permita la veneración de los fieles en la basílica de San Pedro. Con total seguridad, será la primera vez en la historia en la que un pontífice presida el funeral de su inmediato predecesor, pues Francisco celebrará la misa a la que, probablemente, serán invitadas las máximas autoridades de todos los países.