El papa Francisco dedicó sus oraciones a las víctimas de la estampida en Seúl, donde más de 150 personas fallecieron durante un Halloween.
El pontífice pidió rezar por quienes murieron en Seúl, principalmente jóvenes por “las trágicas consecuencias de una repentina estampida de la multitud”.
La actualización de víctimas es 153 personas tras lo ocurrido en una celebración de Halloween en el barrio de Itaewon, en Seúl, capital de Corea del Sur, de acuerdo con el Ministerio de Seguridad Pública.
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