Este viernes, Andrés Manuel López Obrador minimizó el incremento de la inflación en México y aseguró que esta situación “no es para alarmarse”. El presidente señaló que espera que este sea el último incremento y que ya comience a ir a la baja.
“Yo creo que ya es el último incremento, que por cierto no fue muy superior a lo que se esperaba, no llegó ni a un punto, entonces ya pensamos que va a bajar más”, afirmó.
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El mandatario mexicano subrayó que este tema ocupa a su gobierno y que trabajarán en ello; sin embargo, es una situación que no debe de alarmar a los mexicanos. Estas declaraciones nacieron a raíz de que en enero, la tasa de inflación general mexicana subió al 7.91% interanual, registrando un incremento de .09% respecto a diciembre según informó el INEGI.
Respecto al Índice de Precios al Consumidor igualmente registró un aumento del 0.68%. En cuanto al índice de precios subyacente, este subió un 0.71% mensual y un 8.45% anual.
Ante esta situación, el Banco de México elevó la tasa de interés, colocándola en un nivel histórico de 11% con el incremento de 50 puntos base, lo que representó el doble del alza de 25 puntos base que realizó la Reserva Federal en Estados Unidos.