Niño Cieguito, milagroso y venerado en Puebla

Fieles acuden este 10 de agosto al templo de San Joaquín y Santa Ana de la Religiosas Capuchinas para celebrar al Santo Niño Cieguito y pedir por la salud de niños y débiles visuales, principalmente.

Juguetes, cartas y velas se observan en el templo ubicado en la 16 de septiembre 904, como parte de las ofrendas por los milagros realizados, principalmente por las afectaciones en la vista quienes piden con devoción al Niño Cieguito.

La historia del Niño Cieguito deriva de lo ocurrido la noche del 10 de agosto de 1744 cuando los padres del convento de Nuestra Señora de la Merced cerraron la puerta sin percatarse que un hombre se había escondido para robar.

El ladrón empezó a tomar varias cosas y se dio cuenta que el Niño Jesús que sostenía la virgen de La Merced tenía esmeraldas en los ojos, así que tomó  al Niño Dios y huyó al cerro del Punjuato.

Ya en el lugar, con una herramienta filosa le quitó las gemas verdes de los ojos, además de quitarle los brazos y piernas para enterrarlo.

Tras la atrocidad a la imagen, días después el hombre fue detenido y confesó lo que había hecho, al tiempo de que un indígena halló al Niño y lo llevó al convento, ya que tenía sangre en los ojos.

Desde Valladolid, hoy Morelia, los padres trasladaron la imagen al convento de las Capuchinas en Puebla, donde lo restauraron pero dejaron las cuencas sangrantes.