El Obispo Auxiliar Francisco Martínez, consideró que aterradoramente la sociedad se ha ido acostumbrando al mal, lo anterior, ante la ola de violencia que se vive con asaltos, feminicidios, desapariciones y hechos violentos que tanto afectan a la sociedad.
En la tradicional misa dominical, el Obispo habló de Cristo en la cruz donde reflexionó sobre aquellos padres que siguen en la búsqueda por localizar a sus familiares y que se refleja a través del dolor, angustia y soledad.
“Ese dolor, angustia y soledad de Cristo en la cruz clavado en el monte calvario y esas preguntas que se hacían son el mismo dolor de Cristo víctima de las cruces actuales, el dolor de Jesús clavado en la cruz víctimas de la violencia sin precedente que vivimos y donde casi con indiferencia vemos cada día hay más y más hechos violentos como los asesinatos, los feminicidios, los asaltos, los robos y casa vez más cerca de nosotros. Aterradoramente nos hemos ido acostumbrando al mal, hechos que no queremos”, consideró.
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