“Les pedí a mis abuelos que me escriban sus nombres para un trabajo práctico de la facultad pero en realidad eran para tatuármelos, y su reacción me la guardo para siempre”, escribió Agustina Wetzel en su cuenta de Twitter @agustinawetzel junto a un conmovedor video.
En la grabación se ve a la joven de la provincia de Lanús, Buenos Aires, en Argentina dándole instrucciones a sus dos abuelos maternos, llamados Marco y Celoy, para que escriban sus nombres en un cuaderno y les indicó que era para una tarea.
Luego la joven regresó con su abuelo y le preguntó: “¿vos te acordás que me hiciste esto para la facultad, que me hiciste tu nombre? Bueno, mira”, y le mostró que, en la pantorrilla, un poco arriba del talón estaba tatuado su nombre.
Marco mira sorprendido el resultado y le cuestiona si es lo que él había escrito, luego pidió verlo de nuevo y finalmente rompió en llanto, por lo que su nieta se acercó para abrazarlo y comentarle: “no llores. Dame un abrazo, te amo”.
Agustina también fue con su abuela Celoy, que se encontraba en la cocina, y le mostró su pantorrilla tatuada con su nombre y le preguntó si le gustaba, a lo que la anciana respondió: “sí, hija, claro que me gusta”, y se dieron un abrazo.