Japón se proclamó campeón del Clásico Mundial de Beisbol al vencer 3-2 a los Estados Unidos en la final disputada en el LoanDepot Park de Miami, Florida; la “Novena Samurái” conquistó su tercer título en la historia del torneo de naciones y se convierte en el segundo equipo que lo consigue de forma invicta.
Con un elenco de siete lanzadores los japoneses espaciaron nueve imparables de los estadounidenses para llevarse la victoria; en la loma de los disparos destacó el trabajo de Shohei Ohtani que cargó con su primer salvamento al retirar en orden la novena entrada.
Trea Turner puso al frente a los Estados Unidos con un cuadrangular solitario en la segunda entrada; la respuesta de los asiáicos llegó en el mismo episodio con cuadrangular solitario de Munetaka Murakami que empató el compromiso y Lars Nootbaar se encargó de colocar la diferencia un rodado a primera que llevó a Kazuma Okamoto a la registradora.
Okamoto apareció de nuevo en la cuarta entrada con panorámico batazo por el jardín izquierdo que le puso dos de ventaja a los japoneses. Kyle Schwarber acercó a los de las “Baras y las Estrellas” en el octavo rollo, pero fue insuficiente ante la serpentina de los Samuráis.
La Selección de Japón logró su tercer trofeo en el Clásico mundial de Beisbol y se suma los conseguidos en las ediciones de 2006 y 2009; sin olvidar que son campeones olímpicos tras la medalla de oro en los Juegos de Tokio 2020 (2021).