Este jueves marcó un antes y un después en la ya volátil relación entre Israel e Irán. El gobierno israelí ha confirmado la ejecución de un “ataque preventivo” contra instalaciones iraníes, desatando una escalada sin precedentes en la región. Ante la inminente amenaza de represalias, Israel ha declarado el estado de emergencia nacional, preparando a su población para un posible ataque con misiles y drones.
🇺🇸 RUBIO: EE.UU. NO PARTICIPÓ EN EL ATAQUE A IRÁN
— LuisCardenasMX (@LuisCardenasMx) June 13, 2025
“El ataque a Irán fue una acción unilateral de Israel. EE.UU. no participó y nuestra prioridad es proteger a nuestras fuerzas en la región. Irán no debe atacar intereses o personal estadounidense”. pic.twitter.com/u19EeznvZl
Israel en Alerta Máxima: Se Esperan Represalias de Irán
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, fue contundente al anunciar la operación militar y sus consecuencias anticipadas.
“Se anticipa un ataque con misiles y drones contra el Estado de Israel y su población civil en el futuro inmediato”, declaró Katz, subrayando la gravedad de la situación.
El Ejército israelí ha implementado de inmediato medidas especiales de defensa interna, que incluyen:
- Restricción de actividades no esenciales.
- Cierre de escuelas en todo el territorio.
- Suspensión de reuniones públicas masivas.
- Reconfiguración operativa del país a un modelo de “actividad esencial”.
Estas precauciones reflejan la alta probabilidad de una respuesta iraní, manteniendo a la población israelí en un estado de alerta máxima.
Estados Unidos Pide Calma, pero Reconoce el Riesgo de Conflicto
Horas antes del ataque, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había instado a Israel a evitar acciones unilaterales, abogando por una solución diplomática al conflicto nuclear iraní. Sin embargo, no ocultó la posibilidad de un ataque israelí.
“Estamos bastante cerca de un buen acuerdo, no quiero que ellos intervengan, porque eso lo arruinaría”, dijo Trump desde la Casa Blanca, refiriéndose a Israel.
A pesar de su llamado a la moderación, Trump reiteró que Irán debe negociar de forma más exigente y ceder puntos clave para alcanzar un pacto nuclear. Posteriormente, en un intento por desescalar la tensión, el presidente estadounidense reafirmó su compromiso con una solución pacífica al programa nuclear iraní en su red Truth Social, enfatizando que Teherán debe abandonar cualquier ambición de desarrollar armas atómicas.
Desafío Nuclear de Irán y Advertencia a Bases de EE. UU.
Mientras Israel se preparaba para el impacto, Irán respondió calificando la postura occidental de “extremista” tras una resolución del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que condena su falta de cooperación. En un movimiento desafiante, Irán anunció que:
- Iniciará operaciones en un nuevo centro de enriquecimiento de uranio.
- Reemplazará sus centrifugadoras actuales por versiones de sexta generación en su planta de Fordow.
Esta medida aumentará significativamente la producción de material nuclear enriquecido, un punto que Washington ha considerado una “línea roja” en las negociaciones.
🚨#ÚLTIMAHORA
— Carlos Martin Huerta (@carlosmartinh) June 13, 2025
Suenan las sirenas en Israel y llega mensaje en celulares de máxima emergencia.
Israel ha declarado el estado de emergencia luego de un ataque preventivo contra Irán, preparándose para una posible represalia con misiles y drones. pic.twitter.com/xBfRcqJm9L
Además, Teherán ha lanzado una seria advertencia: atacará bases estadounidenses en Medio Oriente si fracasan las conversaciones nucleares, cuya sexta ronda está prevista para el próximo domingo en Omán, con la participación del enviado de Trump, Steve Witkoff. Como precaución, Estados Unidos ha iniciado el retiro parcial de su personal diplomático de Irak y otras zonas estratégicas de la región.
El Acuerdo Nuclear y la Escalada Reciente
Desde abril, Estados Unidos e Irán han sostenido cinco rondas de conversaciones para intentar revivir el acuerdo nuclear de 2015, del cual Trump se retiró durante su primera presidencia. Irán insiste en que su programa tiene fines civiles y exige el levantamiento de sanciones económicas como condición fundamental para avanzar en el diálogo.
El Ministerio de Exteriores iraní confirmó que presentará una contrapropuesta al borrador estadounidense, criticando que el texto actual “contiene ambigüedades” y no garantiza beneficios tangibles para Teherán. El enriquecimiento de uranio por parte de Irán al 60% —muy por encima del 3.67% establecido en el pacto original y peligrosamente cerca del 90% necesario para fines bélicos— sigue siendo el punto más crítico en la mesa de negociación y el motor de la creciente tensión regional.
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