Un preocupante incidente de robo ha sido reportado en la colonia 2 de Marzo en Puebla, donde un hombre fue drogado y posteriormente despojado de sus pertenencias por una sexoservidora a la que había contratado. Este suceso pone de manifiesto una modalidad delictiva conocida como “goteo”, que ha ido en aumento y representa un riesgo significativo para la seguridad personal y patrimonial de los ciudadanos. Las autoridades ya han iniciado una investigación para dar con la responsable y esclarecer los hechos, reforzando el llamado a la precaución entre la población.
Los hechos: Una noche que terminó en robo y engaño
El incidente se desarrolló en el domicilio del afectado, ubicado en la colonia 2 de Marzo de la capital poblana. Según el testimonio de la víctima, este habría contratado los servicios de una sexoservidora y, durante su estancia en la vivienda, ambos compartieron bebidas alcohólicas. En un momento determinado, el hombre perdió el conocimiento de forma abrupta, lo que sugiere que la mujer pudo haberle administrado alguna sustancia para incapacitarlo.
Al despertar, el afectado se encontró en una situación de vulnerabilidad extrema: estaba atado de pies y manos, y al revisar sus pertenencias, descubrió que la sexoservidora había sustraído una cantidad de 2 mil 500 pesos en efectivo, así como otros objetos personales. El robo, perpetrado bajo estas circunstancias, evidencia una estrategia delictiva premeditada y de alto riesgo para las víctimas.
Los vecinos de la colonia no lograron observar el momento en que la mujer abandonó el domicilio, lo que ha dificultado inicialmente su identificación y localización. Sin embargo, este es un punto crucial para la investigación, ya que los testimonios y posibles grabaciones de cámaras de seguridad en la zona serán vitales para recabar pistas.

El “goteo”: Una modalidad delictiva en ascenso
Este caso se enmarca dentro de una preocupante tendencia delictiva conocida como “goteo“. Esta modalidad consiste en que los delincuentes, a menudo mujeres, establecen contacto con sus víctimas —frecuentemente hombres— en lugares de esparcimiento o a través de contactos privados, como en este caso, para luego drogarlos con sustancias que se disuelven en bebidas o alimentos.
El objetivo es dejarlos inconscientes e incapacitados para oponer resistencia, facilitando así el robo de sus pertenencias y, en algunos casos, el vaciado de sus cuentas bancarias. El nombre “goteo” hace alusión a cómo las víctimas, sin darse cuenta, van perdiendo la conciencia gradualmente hasta quedar completamente vulnerables.
Las sustancias utilizadas suelen ser potentes sedantes o hipnóticos que actúan rápidamente y dejan a la persona en un estado de somnolencia profunda o inconsciencia, con poca o ninguna memoria de lo ocurrido. Esto complica tanto la denuncia como la investigación, ya que las víctimas a menudo no pueden recordar detalles clave sobre sus atacantes.
Esta práctica no es exclusiva de Puebla, sino que se ha reportado en diversas ciudades del país y del mundo, afectando a personas de distintos estratos sociales. La facilidad con la que se pueden obtener ciertas sustancias y la relativa impunidad con la que operan estos grupos criminales han contribuido a su proliferación. La naturaleza de estos crímenes añade una capa de trauma psicológico al daño económico.
La respuesta de las autoridades: Investigación y prevención
Ante este tipo de delitos, las autoridades han instado a la población a extremar las precauciones. La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla ha iniciado una investigación por robo a casa habitación en este caso particular. Como parte de las diligencias, se está revisando el material de las cámaras de seguridad de la zona y se están recabando declaraciones de testigos que puedan aportar información relevante para la identificación y captura de la responsable.
Es fundamental que las víctimas de este tipo de delitos presenten la denuncia correspondiente de inmediato. Aunque el estado de confusión y el miedo pueden ser obstáculos, la pronta acción facilita la recopilación de pruebas y aumenta las posibilidades de que los responsables sean llevados ante la justicia. Las autoridades también enfatizan la importancia de ser extremadamente cautelosos al permitir el acceso de extraños a sus domicilios, especialmente si la interacción se da en contextos de ocio o contrataciones de servicios que impliquen una confianza inicial.
Las campañas de prevención se han vuelto esenciales, advirtiendo sobre los riesgos de aceptar bebidas de personas desconocidas o de bajar la guardia en ambientes donde se pudiera ser vulnerable a estas prácticas. La concientización sobre el “goteo” y sus modus operandi es una herramienta vital para que la ciudadanía pueda protegerse.

Implicaciones para la seguridad ciudadana en Puebla
El caso de la Colonia 2 de Marzo es un recordatorio de que la delincuencia adopta diversas formas y que la seguridad ciudadana es un desafío multifacético. La existencia de redes o individuos que se dedican a drogar y robar a personas requiere de una respuesta coordinada por parte de las fuerzas del orden y una mayor vigilancia por parte de la población.
La Fiscalía y la Secretaría de Seguridad Pública trabajan en conjunto para desmantelar estas redes y prevenir futuros incidentes. La colaboración ciudadana, a través de la denuncia y el aporte de información, es un pilar fundamental en esta lucha.
El caso del hombre drogado y robado en Puebla es un llamado de atención para fortalecer la cultura de la autoprotección y para que las autoridades continúen con las labores de investigación y persecución de estos delitos con la máxima diligencia. La justicia para la víctima y la prevención de futuros casos son prioritarias para garantizar la tranquilidad de los habitantes de Puebla.
Noticias Puebla Fallece mujer en colonia El Salvador tras presunta caída