El Gobierno de los Estados Unidos intensificó este sábado sus acciones de presión contra el comercio de crudo sancionado. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, confirmó a través de su cuenta oficial en X la incautación de un segundo petrolero que había atracado recientemente en puertos venezolanos.
La operación se llevó a cabo antes del amanecer y contó con el despliegue de la Guardia Costera estadounidense y el apoyo táctico del Pentágono.
Lucha contra el “narcoterrorismo” regional
Según las declaraciones de Noem, esta medida forma parte de una estrategia de seguridad nacional para asfixiar las fuentes de ingresos de grupos delictivos en el continente.
“Estados Unidos seguirá persiguiendo el tráfico ilícito de petróleo sancionado que se utiliza para financiar el narcoterrorismo en la región”, escribió la secretaria de Seguridad Nacional.
In a pre-dawn action early this morning on Dec. 20, the US Coast Guard with the support of the Department of War apprehended an oil tanker that was last docked in Venezuela.
— Secretary Kristi Noem (@Sec_Noem) December 20, 2025
The United States will continue to pursue the illicit movement of sanctioned oil that is used to fund… pic.twitter.com/nSZ4mi6axc
La funcionaria enfatizó que la detección y detención de estas embarcaciones es una prioridad para interrumpir el flujo de capitales que sostienen la violencia y la inestabilidad en el hemisferio.
El bloqueo de Donald Trump
Esta incautación se produce apenas unos días después de que el presidente Donald Trump anunciara formalmente un “bloqueo” contra todos los petroleros sancionados que intenten entrar o salir de Venezuela.
Esta nueva fase de la política exterior estadounidense busca:
- Impedir el transporte de crudo: Cortar las rutas marítimas de los buques que operan bajo banderas de conveniencia o con sistemas de rastreo apagados.
- Reforzar las sanciones: Aplicar el peso de las fuerzas militares y de seguridad (Pentágono y Guardia Costera) para ejecutar las órdenes ejecutivas.
- Cero tolerancia: Detener cualquier embarcación que haya tenido contacto con infraestructura petrolera venezolana sancionada.
Hasta el momento, no se ha revelado la identidad del buque ni su bandera actual, pero se espera que la aeronave sea escoltada a un puerto estadounidense para el proceso legal correspondiente.
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