Rituales de Año Nuevo: una herramienta simbólica para cerrar ciclos y definir propósitos con intención

Gabriela García.

Con el cierre del año a la vuelta de la esquina, miles de personas en México recurren a rituales decembrinos con el objetivo de atraer nuevos comienzos, manifestar propósitos y dejar atrás ciclos concluidos. Tradiciones como comer las uvas durante las campanadas de Año Nuevo o salir con maletas para atraer viajes se han vuelto cada vez más comunes, no solo por creencia, sino por el valor simbólico y emocional que representan.

De acuerdo con la Dra. Zaira Rosas Lara, coordinadora de Medios Universitarios de la Universidad Iberoamericana Puebla, estos rituales pueden convertirse en herramientas útiles para la organización mental y emocional, siempre que se realicen de manera consciente y con objetivos claros.

La académica explicó que el fin de año representa un momento clave de cierre de procesos y apertura de nuevas etapas, lo que favorece prácticas como escribir propósitos, agradecer lo vivido o anotar aquello que se desea dejar atrás. Estos ejercicios permiten visualizar metas y comenzar el nuevo año con mayor intención y claridad, lo cual impacta positivamente en el bienestar emocional.

Asimismo, subrayó la importancia de formular los propósitos de forma específica y medible, ya que las metas ambiguas suelen postergarse. En contraste, aquellas que se delimitan en tiempo y forma resultan más alcanzables.

Por ejemplo, cambiar expresiones generales como “hacer ejercicio” por objetivos concretos como “ejercitarme dos o tres veces por semana” facilita su seguimiento y evaluación.

La Dra. Rosas Lara destacó que definir el cómo y el cuándo de cada propósito influye directamente en su cumplimiento. También hizo énfasis en la necesidad de vivir estos procesos con amabilidad y realismo, reconociendo que no cumplir todas las metas al cien por ciento forma parte del proceso de crecimiento personal.

Finalmente, invitó a valorar los logros alcanzados a lo largo del año, ya que enfocarse en lo positivo fortalece la motivación para seguir avanzando, incluso en contextos de adversidad o incertidumbre. Desde esta perspectiva, los rituales de Año Nuevo funcionan como recordatorios simbólicos de que las intenciones personales también son una fuente de esperanza, continuidad y renovación.

Te puede interesar: Puebla buscará romper Récord Guinness con la rosca
de Reyes más grande del mundo

¡Cuidado! Este contenido es como el oro: ¡no se puede duplicar!