Marruecos ha escrito un nuevo y glorioso capítulo en su historia futbolística. Con un desempeño magistral, la selección juvenil se alzó con su primer título del Mundial Sub-20 tras vencer 2-0 a Argentina, el máximo ganador histórico de la categoría, en una final emocionante disputada en Chile. Este triunfo no solo es un hito para el fútbol marroquí, sino que también posiciona a esta generación como la gran promesa de cara a la Copa del Mundo 2030, donde serán coanfitriones.
El héroe de la jornada fue el joven ariete Yassir Zabiri, jugador del Famalicão de Portugal, quien con un espectacular doblete selló la victoria de los “Leones del Atlas Juveniles”. Su primer tanto llegó al minuto 12 con un magistral tiro libre que se coló en el ángulo, y el segundo al 29′, tras una brillante asistencia de Othamne Maamma, la otra gran figura del equipo.
Marruecos, dirigido por Mohamed Ouahbi, demostró orden, inteligencia y un potencial que ya había sorprendido al mundo desde el Mundial de Qatar 2022 con la selección mayor. En este torneo juvenil, los marroquíes superaron la fase de grupos como líderes, dejando atrás a potencias como España y Brasil, y en la fase final eliminaron a Corea del Sur, Estados Unidos y Francia, antes de enfrentar a la Albiceleste.
La derrota 2-0 puso fin al sueño argentino de su séptima corona en la categoría y de su primera final desde 2007, dejando una sensación de frustración en un equipo que se vio desdibujado ante el planteamiento marroquí.
El triunfo de Marruecos es apenas el segundo para un país africano en la historia del Mundial Sub-20, tras la hazaña de Ghana en 2009.
Polémica y Proyección
La ceremonia de premiación no estuvo exenta de controversia, pues el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, fue abucheado por los eufóricos aficionados marroquíes al ingresar al campo para entregar el codiciado trofeo.
Más allá del campeonato, la actuación de jóvenes como Zabiri y Maamma confirma a esta generación como el pilar sobre el cual Marruecos construirá su equipo anfitrión para el Mundial 2030. Estos talentos, que ya hicieron historia, se perfilan como las futuras estrellas que representarán a su país en la máxima cita del fútbol.
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