19 Mayo 1962 Marilyn Monroe le canta a John F Keneddy

Happy Birthday, Mr. President fue el famoso tema con que Marilyn Monroe felicitó al entonces presidente de Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy, durante la fiesta celebrada el sábado 19 de mayo de 1962 en el emblemático Madison Square Garden de Nueva York con ocasión de su 45.º cumpleaños ( que era el 29 de mayo).

Jacqueline, que sabía que Marilyn iba a acudir al acto, por lo que no acompañó a su marido; presumiblemente porque sabía que mantenía relaciones con la actriz desde tres meses atrás.

Se habían conocido en una cena privada, organizada por su hermana, Patricia Kennedy, y su esposo, el actor británico Peter Lawford. Al día siguiente, el presidente llamó a Marilyn y la invitó a un viaje al que iba a ir sin su esposa.

Asistieron al evento más de quince mil personas.

En el escenario, Peter Lawford, casado con la hermana del presidente, Patricia, está nervioso. Está intentando –sin éxito– hacer que aparezca frente al público Marilyn Monroe, la estrella del espectáculo. La actriz, a sus 35 años, es tan famosa entonces por sus curvas como por su adicción a las pastillas y sus retrasos a la hora de presentarse en los rodajes.

Al tercer intento, Marilyn aparece por fin. Y el actor la presenta, en alusión a su famosa impuntualidad, como “the late Marilyn Monroe”, que significa ‘la impuntual’ toma el micrófono. Los 15.000 espectadores ríen sin saber que en menos de tres meses estaría muerta.

Monroe camina como una geisha hacia el micrófono con su ajustadísimo vestido, que sería el más caro del mundo cuando alcanzó los 5 millones de dólares en una subasta en 2016. El público se queda boquiabierto. Tras una larga pausa, finalmente, ella empieza a cantar:

En el escenario, aparece una tarta de cumpleaños gigante y el presidente se dirige a la multitud. “Ahora puedo retirarme de la política después de que me hayan cantado el ‘Cumpleaños feliz’ de una forma tan dulce”, dice, con la misma sonrisa maliciosa que luce desde que Monroe cantó la primera nota.

cunpleanos John F kennedy
JFK, frente a su enorme tarta de cumpleaños

Con esa frase aún quedó más en evidencia, para muchos, el affaire que mantenía desde varios meses atrás con la actriz, que terminaría abruptamente con la muerte de esta el 5 de agosto de ese mismo año. 

Más tarde esa misma noche, el jefe de los estudios United Artists, Arthur Krim, ofrece una recepción privada para 75 personas en su casa, donde el fotógrafo oficial de la Casa Blanca, Cecil Stoughton, captura la única foto conocida de Marilyn, Bobby y Jack juntos.

Captura de Pantalla 2021 05 19 a las 7.53.38

Esa noche, la actriz lució un icónico modelo confeccionado en gasa de seda color claro y adornado con dos mil quinientas incrustaciones de cristal cosidas a mano, lo que hacía parecer que iba prácticamente desnuda; la artista lo describió en algún momento como «piel y pedrería».

El vestido era sumamente ceñido que para cerrarlo por detrás se lo tuvieron que coser una vez enfundado, por lo cual empezó a desgarrarse durante la velada. Cabe destacar además que Marilyn prefirió ponérselo sin ropa interior, lo que, a la vista del público, aumentaba la impresión de que no llevaba nada encima.

marilyn monrie

Había sido diseñado por el modisto francés Jean-Louis Berthault, más conocido como Jean-Louis (1907-1997), a quien se lo encargó tras ver sus fabulosos modelos para Marlene Dietrich, quien –aún cumplidos los 60 años– seguía luciendo una espléndida figura en sus shows de cabaret.

En 1999, fue vendido en la sala Christie’s de Nueva York por un importe de 1,26 millones de dólares (1,12 millones de euros) al conocido analista financiero Martin Zweig, quien lo conservó en una vitrina isotérmica del hotel The Pierre de Nueva York hasta su fallecimiento en febrero de 2013.

En septiembre de 2016, la casa Julien’s Auctions de Beverly Hills anunció que –el 17 de noviembre– sería subastado por los herederos de Zweig , esperando que se pagaran por él hasta tres millones de dólares). Finalmente fue adjudicado a la empresa Ripley´s Believe It or Not! dedicada a la exposición de todo tipo de objetos curiosos y singular por 5 millones de dólares.

¡Cuidado! Este contenido es como el oro: ¡no se puede duplicar!