En un paso significativo para la protección de la salud pública, la Comisión de Salud del Congreso del Estado de Puebla aprobó por unanimidad la iniciativa que prohíbe la aplicación e inyección de sustancias como bótox y ácido hialurónico, así como la realización de cirugías plásticas, estéticas o reconstructivas, en establecimientos que carezcan de la licencia médica adecuada. Esta medida, que busca salvaguardar la integridad física de los ciudadanos, se aplicará en peluquerías, salones de belleza, spas, gimnasios y otros lugares similares.
Un paso crucial para la salud y seguridad estética
La aprobación en comisiones de esta importante reforma a la Ley Estatal de Salud se concretó este martes 24 de junio. La propuesta, impulsada por la diputada morenista Azucena Rosas Tapia desde el 31 de octubre de 2024, responde a una creciente preocupación por los riesgos sanitarios asociados a procedimientos estéticos invasivos realizados por personal no calificado y en entornos que no cumplen con las condiciones sanitarias y médicas necesarias.
La presidenta de la Comisión de Salud, diputada Nayeli Salvatori Bojalil, enfatizó la complejidad de la fisonomía humana, especialmente la del rostro, donde una inyección mal aplicada puede tener consecuencias fatales al afectar nervios o arterias. Esta regulación busca poner fin a la proliferación de lugares que ofrecen servicios de medicina estética sin la debida profesionalidad y seriedad que requieren tales intervenciones. La seguridad del paciente es la prioridad central.
Alcance de la prohibición y procedimientos afectados
La nueva disposición legal será explícita al prohibir que establecimientos como salones de belleza, spas, gimnasios o cualquier otro similar, así como individuos sin la cédula profesional y licencia adecuada, realicen una serie de procedimientos. Esto incluye la inyección o infiltración de sustancias para modelar o aumentar regiones del cuerpo (como el bótox y el ácido hialurónico), la colocación de implantes, y la ejecución de cirugías plásticas, estéticas o reconstructivas.
El objetivo es claro: concentrar la realización de estos procedimientos en manos de médicos especializados y en clínicas certificadas que garanticen las condiciones de higiene, asepsia, equipo y supervisión médica indispensable. Esta medida busca combatir la clandestinidad y la informalidad en un sector que, al no estar regulado adecuadamente, expone a los consumidores a graves riesgos para su salud y bienestar.
Razones detrás de la reforma: Protección y prevención de casos trágicos
La iniciativa surge de la necesidad de atender y prevenir casos catastróficos que han ocurrido a nivel nacional, e incluso en la región, debido a la mala praxis en procedimientos estéticos. Se ha citado, por ejemplo, el trágico caso de Claudia Verónica Nolasco Villarreal, quien lamentablemente perdió la vida durante un procedimiento de liposculpture en un spa no certificado. Estos incidentes subrayan la urgencia de una legislación más estricta que proteja a los ciudadanos.
La diputada Rosas Tapia ha señalado que la preocupación fue recogida de la “creciente praxis de inocular sustancias y tratamientos en espacios no clínicos”, los cuales “no cuentan con las condiciones sanitarias, ni la supervisión médica necesaria para estos procedimientos”. La reforma es un llamado a la cultura del consumidor para que no se arriesgue la salud por ahorrarse unos pesos, instando a la ciudadanía a no escatimar cuando se trata de su bienestar.
Implicaciones y futuras acciones legislativas
Una vez que la reforma sea votada por el Pleno del Congreso del Estado de Puebla, lo cual está previsto para este jueves 26 de junio, entrará en vigor. La legislación establece que solo médicos con cédula profesional y capacitación especializada podrán llevar a cabo estas intervenciones. Además, se exigirá que su certificación sea renovada cada cinco años mediante un examen, asegurando así una constante actualización y el mantenimiento de altos estándares profesionales.
Para aquellos establecimientos o individuos que no cumplan con esta nueva ley, se contemplan sanciones económicas severas, que podrían alcanzar multas de hasta 452 mil pesos. Este régimen de multas busca ser un disuasorio efectivo contra las prácticas ilegales y la irresponsabilidad en el sector estético. La regulación es parte de un esfuerzo más amplio del Congreso poblano para controlar y formalizar las cirugías plásticas, estéticas y reconstructivas, eliminando vacíos legales que permitían la operación de clínicas ilegales y la proliferación de falsos especialistas.
Un mensaje claro para consumidores y profesionales
Con esta medida, el Congreso de Puebla envía un mensaje claro tanto a los consumidores como a los proveedores de servicios estéticos. A los ciudadanos se les insta a buscar únicamente a profesionales de la salud certificados en lugares debidamente autorizados, priorizando su vida y bienestar por encima de consideraciones económicas.
A los establecimientos y personas que realicen estos procedimientos sin la debida licencia, se les advierte sobre las graves consecuencias legales y económicas que enfrentarán. La salud de los poblanos es una prioridad innegable, y esta legislación busca garantizar que los procedimientos estéticos sean seguros y se realicen bajo la supervisión de expertos.
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