Este viernes 15 de julio se cumplen 25 años del asesinato del diseñador italiano Gianni Versace. La mañana del 15 de julio de 1997, Versace recibió dos disparos a quemarropa en la puerta de su mansión en Miami.
El diseñador regresaba de un desayuno cuando un trabajador sexual de 27 años, identificado como Andrew Cunanan, le disparó, y le causó la muerte al instante.
Versace había creado su propio sello que lo diferenciaba de otros diseñadores italianos como Giorgio Armani y Murcia Prada, famosos por sus líneas elegantes y sencillas, además de colores más neutros. Versace, en cambio, seguía ofreciendo estilos coloridos y estrafalarios.
Este homicidio despertó una batalla por el control del emporio de la marca. En su testamento, Versace dejó el 50 % de su imperio de la moda a Allegra Beck, su sobrina, hija de Donatella. Allegra tenía apenas once años cuando su tío fue asesinado. Sin embargo, al cumplir la mayoría de edad en 2004, heredó alrededor de 500 millones de dólares (50% de la compañía) del imperio de moda Versace.
La hermana de Gianni, Donatella Versace, asumió tras su muerte como la nueva líder del departamento de diseño, cargo que conserva hasta la actualidad.
Esta historia de una reconocida familia despertó el intereses de productores, quienes han hecho varias entregas audiovisuales inspiradas en este crimen y las diferentes hipótesis que manejaron las autoridades sobre el crimen de Versace.
¿Posible robo?
La policía inicialmente creyó que se trataba de un robo de la cartera del diseñador que tenía más de 1.200 dólares en efectivo, pero cuando comenzaron a descifrar quién fue el asesino esta teoría perdió fuerza y se inclinaron más por el hecho de que su victimario había asesinado a cuatro personas antes.
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¿Mafia?
Los investigadores encontraron una paloma muerta junto al cadáver de Versace que desató una conjetura: Cunanan era un asesino a sueldo. Aunque esto nunca tuvo más pruebas.
Giuseppe Di Bella, un exmiembro de la mafia calabresa aseguró que el asesinato fue un ajuste de cuentas ordenado por Paolo de Stefano, con quien el diseñador “tenía deudas pendientes”, sin embargo, todas las declaraciones fueron desmentidas por la familia Versace y hasta anunció acciones legales contra el exmiembro de la mafia.
Incluso un ataque de celos llegó a estar entre las posibilidades del crimen del diseñador, pero tras varios meses de investigaciones, un informe de 700 páginas y más de una docena de videos, ninguna hipótesis pudo ser comprobada.