Durante la sesión de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE) aprobó la exclusión de Rusia de la organización al considerar que el país “cometió graves violaciones” por la invasión a Ucrania.
Este martes con 216 votos a favor y tres abstenciones, previamente el Gobierno ruso había entregado una carta de su salida y anunció que lo hace “por voluntad propia”.
Rusia, después de 26 años, deja de ser miembro del organismo que defiende derechos humanos y principios democráticos.
La salida implica que los ciudadanos rusos no podrán apelar al Tribunal Derechos Humanos de Estrasburgo cuando consideren que el Estado vulnere sus derechos fundamentales.