Gabriela García Muñoz
La tradicional compra de ropa interior roja y amarilla para recibir el Año Nuevo mantiene su vigencia en Puebla, registrando un ligero repunte en ventas durante los últimos días del año, según reportan comerciantes locales.
“Este año la gente está más interesada en atraer la prosperidad económica”, señala Bertha Castillo Reyes, comerciante del Mercado La Acocota, quien indica que las prendas de color amarillo, asociadas con la abundancia y el dinero, han superado en ventas a las rojas, tradicionalmente vinculadas con el amor.
La comerciante destaca que, aunque las ventas iniciaron desde el 24 de diciembre, la oferta de modelos y diseños fue más limitada este año. “Los fabricantes fueron más cautelosos con la producción debido a la menor demanda de años anteriores”, explica Castillo.
A pesar del contexto económico actual, que ha influido en los patrones de compra, tanto hombres como mujeres continúan acudiendo a los mercados locales para adquirir estas prendas, manteniendo viva una costumbre que mezcla superstición y esperanza en la cultura poblana.
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