Gabriela García
Al menos 2 mil establecimientos del sector restaurantero en la ciudad de Puebla se unirán al llamado del “cacerolazo” para exigir al gobierno estatal y municipal una solución para reactivar los negocios de la industria, los cuales están agonizando.
Olga Méndez Juárez, presidenta del organismo, afirmó que a lo largo de la pandemia la industria restaurantera ha actuado responsablemente, acatando todos los decretos estatales en los que se prohibían la venta de alimentos en mesa, sin embargo, las cosas cambiaron, pues ya hay una verdadera desesperación por parte de los empresarios del sector de no saber cuándo volverán abrir sus establecimientos.
“Nosotros lo que necesitamos es una postura firme de las autoridades en cuanto a que nos digan ya un día para regresar a trabajar, porque en la medida que se alargue el confinamiento, la gente se va a terminar sus ahorros y su única opción será bajar la cortina”, comentó.
En entrevista con Así Sucede, la dirigente empresarial explicó que tanto propietarios como trabajadores de restaurantes mostrarán su descontento golpeando cacerolas, ollas u otros utensilios, pero desde sus instalaciones. Dijo que su intención es levantar la voz, pero sin salir a las calles para seguir privilegiando el tema de salud.
Méndez Juárez agregó que es un llamado de auxilio, pues ya no pueden más. En este sentido, reveló que este fin de semana, cerca de 40 establecimientos dedicados a la venta de alimentos y bebidas pusieron en liquidación sus equipos de cocina, porque definitivamente ya no van a volver abrir.
Finalmente, precisó que seguirán reforzando el diálogo con las autoridades del ayuntamiento de Puebla, a quienes les solicitarán algunas condonaciones o descuentos en el pago de impuestos municipales. También, buscarán un acercamiento con el gobierno estatal para ver en qué puede apoyar tanto a los empresarios como a los trabajadores que dependen de esta industria.