La Organización Panamericana de la Salud reportó que las muertes por COVID-19 en América disminuyeron por primera vez en seis semanas; en el caso de Norteamérica, si bien los contagios se redujeron un tercio, en México se detectó un aumento del 70% en las nuevas infecciones.
En concreto, se notificó una reducción del 9 % en los fallecimientos por la enfermedad, ya que se notificaron 29.000 muertes.
Asimismo, los contagios tuvieron un descenso en relación a la semana previa del 28 % tras registrar 2,2 millones de nuevos casos en la región, explicó en rueda de prensa telemática desde Washington la doctora Carissa Etienne, directora de la OPS.
Sin embargo, “muchos lugares siguen enfrentando al pico de la ola de infecciones”, por lo que “debido a la rápida diseminación de ómicron y la posibilidad de que surjan nuevas variantes las medidas sociales tienen que continuar”, consideró la doctora.
En cuanto a las muertes, aunque también cayeron en Estados Unidos, “las cifras todavía se sitúan entre las más altas registradas durante la pandemia”, indicó Etienne.
En Centroamérica los fallecimientos se redujeron un 17 %. No obstante, en Nicaragua los contagios aumentaron en un tercio y en Honduras también siguieron incrementándose los ingresos en unidades de cuidados intensivos y los decesos por la covid-19.
En Suramérica también se vio esta tendencia a la disminución de los decesos, en un 13 %, aunque algunos países siguen enfrentándose al pico de la ola ómicron como es el caso de Chile, donde los ingresos en UCI se aceleraron una cuarta parte y las muertes aumentaron un 37%.