El papa Francisco expresó su cercanía con el pueblo de Marruecos tras el devastador terremoto y pidió ayuda de la comunidad internacional para apoyar a la población.
Tras el rezo del Ángelus, el pontífice rezó por los heridos y por los tantos que han fallecido, así como por sus familias.
Agradeció a los socorristas y a todos los que trabajan para “aliviar el sufrimiento de la población”, tras la tragedia del sismo magnitud 6.8.
“La ayuda concreta de todos pueda apoyar a la población en este trágico momento. Estamos cerca del pueblo marroquí”, dijo el papa.
El último balance es de más de 2 mil muertos y más de 2 mil heridos, aunado a que este domingo se reportó una réplica magnitud 3.9.
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