- La actriz Irma Consuelo Cielo Serrano Castro, mejor conocida como “La Tigresa” falleció este día a los 89 años de edad, alrededor de la 1 de la madrugada en un hospital en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Irma Consuelo Cielo Serrano Castro nació el 9 de diciembre de 1933 en Comitán de Domínguez, Chiapas.
Fue prima de la poetisa Rosario Castellanos.
Fue la Asociación Nacional de Interpretes (ANDI) la encargada de confirmar el fallecimiento a través de sus redes sociales.
La actriz y cantante originaria de Chiapas alcanzó su fama en 1960 con películas y canciones rancheras.
Como cantante la fama le llegó con la pantalla grande, donde participó en cintas como El hijo de Gabino Barrera (1965), Los amores de Juan Charrasqueado (1968), La martina (1972), entre otras.
En sus inicios, posó desnuda y fue retratada en dos ocasiones por Diego Rivera.
¿Por qué le decían La Tigresa?
Fue en 1968, cuando Serrano comenzó a utilizar el seudónimo de “La Tigresa”, apodo que tomó de una historieta en la cual había protagonizado y fue realizada por el editor José Guadalupe Cruz Díaz.
Se menciona también que el apodo surgió porque la actriz contaba con una voz especial, cantaba canciones rancheras y era tanto su éxito que le pusieron “La tigresa de la canción ranchera”.
Quedando finalmente el apodo “La Tigresa”.
Compra Teatro Virginia Fábregas
En 1973 compró Teatro Virginia Fábregas, que remodeló y le cambió el nombre a Teatro Fru Fru, donde se presentaba como actriz de teatro y productora de varias obras teatrales. Se considera que puedan realizar un homenaje póstumo en este recinto.
De 1994 al año 2000, incursionó en la política y formó parte del Senado de México.
Amante de Gustavo Díaz Ordaz
La Tigresa reveló en su libro autobiográfico “A calzón Amarrado” que fue amante de Gustavo Díaz Ordaz durante su gobierno como presidente de México de 1964 a 1970 y que le regaló una casa en Jardines del Pedregal para tener encuentros y además también la llevaba de visita a Los Pinos. El amor entre ambos comenzó casi un año después de la masacre de Tlatelolco en 1968 cuando el político recibía amenazas por todo lo sucedido.
También tuvo amoríos con hombres más jóvenes que ella, como Poncho de Nigris, Pato Zambrano y José Julián.
La Tigresa siempre reconoció fanática de coleccionar antigüedades, y aseguran que vivía con muebles lujosos como la cama de Carlota, así como algunas joyas, y un piano de Maximiliano de Habsburgo.