La compañía española OHLA, que fue involucrada en una de las investigaciones que se siguen en México contra el expresidente Enrique Peña Nieto por presuntos hechos de corrupción, se mostró el miércoles dispuesta a colaborar con las autoridades mexicanas en el caso, que ha generado dudas entre opositores que acusan al gobierno de montar una “farsa”.
La constructora española dijo en un comunicado que los hechos referidos por la Fiscalía General de la República (FGR) se remontan al 2017, cuando la empresa vendió su filial mexicana y toda la división de concesiones del grupo a la compañía Aleática, y agregó que OHLA “no cuenta con ningún activo concesional en México ni mantiene vínculo con OHL México”.
“Las actividades investigadas no tienen nada que ver con la actividad de construcción de la compañía en México”, indicó OHLA tras ratificar su disposición a colaborar en el proceso y su compromiso en prevenir y evitar cualquier hecho de corrupción.
Horas antes, el presidente Andrés Manuel López Obrador se distanció de las tres investigaciones que inició la FGR contra su antecesor, y afirmó que no interferirá si alguna institución emprende procesos.
“Los procesos que existen tienen que tener su curso. Nosotros no podemos decirle al fiscal que no actúe”, dijo López Obrador en su conferencia matutina al ser cuestionado sobre las averiguaciones que inició la Fiscalía General de la República por presuntos hechos de corrupción contra Peña Nieto, quien gobernó México entre 2012-2018.
El Ministerio Público anunció el martes, tras una consulta popular que hizo el gobernante para que se dieran a conocer los casos, que Peña Nieto tiene tres carpetas de investigación por presuntos delitos electorales, patrimoniales, lavado de dinero, transferencias internacionales ilegales y enriquecimiento ilícito, en uno de los cuales estaría involucrada OHLA.
La apertura de las averiguaciones no implica que se inició un proceso penal contra el expresidente, quien actualmente reside en España.
Tras recordar la consulta popular que hizo el año pasado para consultar a los mexicanos si estaban a favor de que se iniciaran procesos contra los expresidentes, que no prosperó por la poca participación de electores, el gobernante descartó que vaya a presentar denuncias contra sus antecesores, y precisó que sólo lo haría “si la gente lo pedía”.
Al ser cuestionado si estaría dispuesto a pedirle a Peña Nieto que retorne al país para enfrentar las investigaciones, López Obrador respondió que “eso lo tiene que decidir la Fiscalía. No me corresponde a mí, y no es mi fuerte la venganza”.