Fernando Aguilar
“One hit wonder” se le llama entre los aficionados a la música a aquél artista, cantante, intérprete, grupo o banda que logra un éxito impresionante con una canción y así como emergieron de la nada… ¡fummmmmm!… igualmente desaparecen.
Para mí, uno de los casos más claros que he vivido es “Eye of the tiger” del grupo “Survivor”, pero además, también sucede con ésta canción que las personas, cuando la escuchan, no saben qué canción es ni quién la toca, simplemente dicen “la canción de Rocky” e inmediatamente muchos empiezan a hacer movimientos de boxeador, bueno, de boxeador campeón del mundo.
¿Es frustrante?, cuando recibes un Premio de la Academia (Oscar) por Mejor Canción Original y vendes más de cinco millones de copias, eso es lo que menos importa. Nueve millones con todo y las descargas que ahora también se contabilizan.
La canción que el actor Sylvester Stallone solicitó directamente que fuera el tema de su película “Rocky III”, se colocó un día como hoy de 1982 en el número uno de las listas de popularidad en los Estados Unidos. La escribieron Frankie Sullivan y Jim Peterik, los fundadores en 1978 de “Survivor”, ellos mismos son los productores.
Stallone les envió una canción “muestra” para que supieran qué era lo que buscaba: “Another one bites the dust” de “Queen”. Cuando le preguntaron que por qué no se quedaba con esa que era perfecta para lo que quería, Sylvester mencionó que iba a ser muy complicado obtener los derechos de uso de esa canción porque “Queen” no iba a aceptar.
Muchos que de por sí la conocíamos, la hemos “tocado” en los juegos “Guitar Hero” y “Rock Band”. Es la número 23 de las “All-time Top 100 Songs” que se publicó en 2013.
En “Rocky IV” repitieron la dosis con la canción “Burning heart”, pero es claro que fuera de esas dos canciones, “Survivor”, Jim Peterik y Frankie Sullivan, no son tan conocidos como Rocky Balboa o Apolo Creed.
Que suene la campana y todos a boxear