“¡Déjenos entrar, déjenos entrar!”, fue el grito recurrente por parte de los fans de Bad Bunny en su primer concierto en la Ciudad de México, al momento que no les permitieron el acceso al Estadio Azteca.
El enojo y desilusión de los asistentes al espectáculo se presentó al momento que les negaron el acceso por que los boletos habían sido comprados de manera ilegítima, puesto que fueron clonados.
La molestia motivó a los seguidores del cantante a tomar una actitud agresiva, comenzando a retirar vallas para poder entrar a la fuerza.
Es importante recordar que, para la compra de estos boletos, incluso hubo quienes acamparon en el Azteca a fin de ganar un mejor lugar para ver al reguetonero, pero no pudieron ingresar debido a que en los accesos les indicaron que sus boletos estaban duplicados o eran falsos.
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