La directora del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el Sida (Censida), Alethse de la Torre Rosas, informó que en México viven con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) siete mil 852 personas mayores sin seguridad social, de ellas, siete mil 722 se encuentran en tratamiento antirretroviral y 69 en profilaxis.
Durante su participación en el simposio “Personas mayores olvidadas: deuda del sistema de salud”, organizado por la Academia Mexicana de Medicina de México A.C., explicó que los estados con mayor concentración de personas mayores en tratamiento son Ciudad de México, Veracruz, Jalisco y Estado de México.
La especialista sostuvo que siete de cada diez personas adultas mayores con VIH son hombres y 90 por ciento se encuentran indetectables; es decir, no pueden transmitir el virus. No obstante, 30 por ciento se diagnostican y vinculan a atención tardía, lo cual dificulta su control viral.
Por este motivo, recalcó que es fundamental el reconocimiento de los derechos de las personas adultas mayores, así como el desarrollo de campañas, evaluaciones y estrategias de atención enfocadas en sus necesidades, apropiadas culturalmente con visión de género y derechos humanos.
Alethse de la Torre Rosas señaló que entre los avances impulsados desde Censida está la triple optimización de la terapia antirretroviral en México, la cual ha permitido que las personas mayores obtengan mejores opciones terapéuticas.
En ese sentido, 83 por ciento de personas en esa franja etaria recibe tratamientos en tableta única con mínimos efectos adversos e interacciones.
En su ponencia “La persona mayor con VIH/sida”, expuso que se avanzó en la atención a las personas mayores migrantes con VIH y hepatitis, quienes provienen de Estados Unidos, Cuba, Canadá y Guatemala, entre otros países.
Resulta esencial comprender que las personas mayores que viven con VIH enfrentan una serie de desafíos adicionales.
Las comorbilidades cardio-metabólicas como hipertensión y diabetes tienen alta prevalencia en este grupo de población.
En Latinoamérica, 68 por ciento de personas adultas mayores que viven con VIH tienen al menos una comorbilidad.
La titular de Censida señaló que la atención integral con calidad a personas mayores que viven con VIH debe incluir el acceso a servicios médicos especializados en enfermedades relacionadas con la edad y VIH.
A su vez, la directora general del Instituto Nacional de Geriatría (Inger), Carmen García Peña, aseguró que las personas mayores pueden estar más expuestas a diferentes grados de discriminación por edad.
Refirió que la Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis) 2022 señala que 31 por ciento de la población mayor de 60 años en México sufrió discriminación durante las consultas médicas. Ante esto, hizo un llamado a cambiar la narrativa del envejecimiento como una tragedia y dejar de alimentar la discriminación en la sociedad.