El papa emérito Benedicto XVI se retractó tras sus declaraciones centrales para el informe sobre el encubrimiento de abusos sexuales en la Iglesia católica en Alemania que fue presentado la semana pasada.
El papa emérito alemán reconoció que el estaba presente en una reunión del obispado de Múnich y Freising en enero de 1980 en la que se trató el cambio de sede de un sacerdote acusado de abuso a menores, según informó la Agencia Católica de Noticias.
Sin embargo, Ratzinger, a la sazón arzobispo de Múnich, afirmó que en aquella reunión no se comentó de que el sacerdote desempeñara labores pastorales, sino solamente de “hacer posible que contara con alojamiento en Múnich durante su tratamiento terapéutico”. El sacerdote identificado como Peter H., cometió nuevamente abusos en la archidiócesis de Múnich, lo que llevó a que fuera trasladado nuevamente.
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El informe realizado por un despacho de abogados pedido por la Iglesia Católica en Alemania y que se habría revelado la semana pasada, es “muy probable” que Ratzinger supiera de este y varios casos más y no tomará cartas en el asunto.
En el informe también se asegura que Ratzinger faltó a la verdad tras asegurar en su posicionamiento que no se encontraba presente en la reunión en enero de 1980, ya que según las actas intervino en ella y no se encontraba como ausente.
Según las declaraciones del papa emérito las cuales fueron citadas por CNA, ello se debe a “un error sin mala intención” que ocurrió durante el proceso de redacción de su posicionamiento frente a las alegaciones, un texto de 82 páginas.
Por su parte, Georg Gänswein, secretario privado de Ratzinger, comentó que más adelante, el alemán presentará un mensaje más elaborado ante el informe, pero que por ahora la lectura del documento le llena de “vergüenza y dolor”.
Tras lo sucedido, en los últimos días han habido diversas críticas respecto al comportamiento del papa emérito, el cual fue tildado de “desastroso” por el presidente de la Conferencia Episcopal alemana, Georg Bätzing. Por su parte, el obispo de Aquisgrán, Helut Dieser, criticó esta situación durante un sermón asegurando que Ratzinger debe asumir la responsabilidad que le corresponde.
“No puede ser que los responsables se escabullan con referencias a que no sabían nada o a que entonces había otra situación u otros procedimientos,” afirmó.
“Porque ese es el motivo por el que entonces no se detuvo a los perpetradores y se siguió abusando de niños,” agregó, según declaraciones citadas por la cadena pública ARD.