Thalía Becerra
Un juez federal ha dictado una sentencia histórica de 106 años de prisión contra Fernando Sánchez Olivera, un ex policía municipal, por el asesinato de dos agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) en Puerto Vallarta.
Los hechos ocurrieron en 2021, y la sentencia, que se cumplirá en el penal de máxima seguridad de El Altiplano, pone fin a un caso que conmocionó a la comunidad policial.

Un crimen perpetrado en instalaciones oficiales
El incidente tuvo lugar en las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) en Puerto Vallarta, Jalisco. En ese momento, Sánchez Olivera se encontraba bajo custodia.
Según las investigaciones, el ex agente aprovechó un descuido para desarmar a uno de los elementos y abrió fuego contra dos agentes que se encontraban en el lugar, quienes murieron de forma instantánea.
Después del ataque, el responsable logró darse a la fuga, lo que desencadenó un operativo de búsqueda a nivel nacional.
Prófugo por un año y captura en Colima
Tras el brutal asesinato, Sánchez Olivera permaneció prófugo de la justicia durante casi un año. Fue finalmente detenido en Colima, como resultado de una operación coordinada entre autoridades de los tres niveles de gobierno.
Una vez capturado, fue trasladado al penal de máxima seguridad de El Altiplano, donde permaneció bajo prisión preventiva mientras se desarrollaba el proceso judicial en su contra.

Múltiples delitos y sentencia ejemplar
El Ministerio Público Federal presentó pruebas sólidas que acreditaron la responsabilidad de Sánchez Olivera en múltiples delitos graves. El juez lo encontró culpable de:
- Evasión de presos.
- Robo.
- Portación de armas de uso exclusivo del Ejército.
- Homicidio calificado en grado de tentativa.
- Homicidio calificado consumado contra servidores públicos.
La FGR ha señalado que esta condena ejemplar es un precedente importante en la lucha contra la impunidad y un respaldo a los agentes que arriesgan su vida en el cumplimiento de su deber.
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