La Liga de Indonesia reportó un saldo de 127 muertos, 180 lesionados, al concluir un partido de futbol donde el Arema FC perdió 2-3 contra el Persebaya, conocido como el Derby de Java Oriental.
Aficionados del Arema invadieron el campo de juego, furiosos por la derrota, originando un enfrentaron con miembros de la policía, los uniformaron lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a el grupo, esto a su vez provocó pánico en el retos de los asistentes.
De acuerdo a los reportes de los medios de comunicación algunas personas murieron en el estadio, mientras que las otras víctimas fallecieron a los alrededores.