El gobierno peruano declaró persona non grata al embajador mexicano, Pablo Monroy Conesa, y le dio 72 horas para abandonar el país.
La restricción es en respuesta a la “injerencia” que consideran que han hecho las “altas autoridades” de México, entre ellas el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La declaración se hizo en respuesta a la insistencia de López Obrador de que Pedro Castillo sigue siendo presidente de Perú, sin reconocer a Dina Boluarte como la nueva mandataria que fue nombrada por el Congreso peruano.
Así también el canciller Marcelo Ebrard confirmó que el Gobierno de México le concedió el asilo a la familia del expresidente peruano, Pedro Castillo.