Gabriela García Muñoz
A partir de este jueves 4 de enero, la Arquidiócesis de Puebla tendrá un nuevo obispo auxiliar que ayudará a liderar la iglesia católica.
Se trata de monseñor Francisco Javier Martínez Castillo, quien recibió la ordenación episcopal por parte del arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa; del nuncio apostólico en México, Joseph Spiteri; y del cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo emérito de México.
En el Centro Expositor y ante más de siete mil fieles católicos, el obispo auxiliar se comprometió a vivir de acuerdo con las enseñanzas de la iglesia.
“Yo Francisco Javier Martínez Castillo, promovido a la Sede Episcopal de Nepte y de Puebla de Los Ángeles, seré siempre fiel a la iglesia católica y al romano pontífice, su pastor supremo. Con plena libertar acatare la suprema autoridad de la iglesia y llevaré a cabo sus mandatos”, expresó.
Durante la celebración, el nuevo obispo auxiliar leyó la Bula Papal, que es un documento pontificio, expedido por el Papa o por la Cancillería Apostólica, y la mostró a los obispos y a los creyentes presentes.
Como marca el rito también se llevó a cabo la oración colecta, la liturgia de la palabra, la secuencia de la pascua y la proclamación del evangelio según San Juan.
A continuación, monseñor Francisco Javier recibió los signos episcopales: mitra, anillo y báculo, y posteriormente culminó con el saludo de la paz, que es un símbolo de comunión con los Obispos y su iglesia.
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