El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, calificó como “un montaje frustrado” el supuesto crematorio clandestino en los límites de Iztapalapa y Tláhuac, y que todo se debe a la temporada electoral.
“No se localizó ninguna fosa, ningún crematorio y no había restos humanos sino fauna canina”, dijo Batres durante la conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional.
Aseguró que se debe a un movimiento político por la temporada electoral que “buscaba afectar al Gobierno de la Ciudad, dejar en mal al Gobierno de la Ciudad”.
“Podría decir ya después de lo que sucedió, un montaje frustrado, nosotros respetamos la labor auténtica, la de quienes trabajan en encontrar a personas desaparecidas, pero en este caso se buscó lucrar políticamente con el dolor humano y con una causa justa, lamentablemente”, precisó.
Fue la activista Ceci Flores, del colectivo de Madres Buscadoras de Sonora, quien reportó el hallazgo del lugar en la capital del país.