¿Masculinidad, caballerosidad ó maltrato?

Conjunto de atributos, valores, comportamientos y conductas que son característicos del hombre en una sociedad determinada.

Más allá del sexo biológico, el papel de hombre (al igual que el de mujer) se aprende y se desarrolla desde tres fuentes fundamentales:

La familia, la sociedad y la cultura.

Éstas están sujetas a lo que se considera aceptable, correcto o adecuado en cada tiempo, aunque pasado ese tiempo, con los cambios sociales, lo que antes podría haber sido aceptable, ahora no lo es.

  • Hombres controladores o maltratadores

Características:

Dominio, autoridad, posesión, rechazo, desprecio, falsa modestia. comportamiento que  genera sufrimiento y dolor.

  •  La personalidad controladora no suele mostrarse al principio de la relación, sino que a medida que pasa el tiempo comenzará a aflorar.
  •  Trata de revisar todo cuanto le rodea y siempre parece estar a la defensiva. Se enfada con facilidad y, en algunos momentos, trata de contener su agresividad.
  • La obsesión por controlar dónde se encuentra su pareja en cada momento, con quién habla o qué amistades tiene es como su prioridad en la relación.
  • A los hombres posesivos y controladores les cuesta mucho trabajo gestionar o dominar sus sentimientos al grado de someter y anular a la otra persona, sintiéndola como de su propiedad y con libertad para decidir sobre ella sin tenerla en cuenta, lo que suele derivar en situaciones de maltrato psicológico.

Lo importante en estos casos es eliminar el concepto de pertenencia en el amor, al igual que la creencia de que los celos son una demostración de este sentimiento. 

  • El hombre posesivo y controlador animará a su pareja a dejar sus aficiones, inquietudes y amistades.

 Aunque socialmente no existe un prototipo de hombre posesivo y controlador, existen una serie de rasgos y actitudes comunes a los que podemos recurrir para definirlos.  

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Las primeras señales de alarma son las negativas, desprecios y rechazos hacia la pareja disfrazados de falsa modestia con la excusa de que son solo advertencias para mejorar, junto a interrogatorios sobre cada detalle del día a día. 

El problema es que poco a poco la víctima va perdiendo su identidad y restando importancia a cualquier comportamiento que le genere sufrimiento y dolor, mientras comienza a medir cada una de las palabras que pronuncia y el deseo de saber de la otra persona que se vuelve obsesión y control, revisando todo lo que le rodea, estando a la defensiva, enfadándose fácilmente, coartando la libertad del otro con sentimientos de inseguridad y desconfianza en sí mismo, con el temor a dejar de ser el centro de atención del ser amado, aún sin que esto sea cierto, teniendo miedo al abandono.

¿Cómo eran las infancias de esos hombres agresivos? ¿Qué se les dijo o enseñó sin palabras acerca de lo masculino, lo femenino y sus roles y sitios en la sociedad?

Esta pregunta no es para justificar lo injustificable, sino para entender el fenómeno y poder combatirlo de manera preventiva desde la niñez ahora mismo.

– Antes que hombres y mujeres, somos personas.

– Antes que personas somos seres humanos.

– Antes que seres humanos somos seres vivos.

Si enseñamos a los niños el respeto a toda forma de vida, estaremos enseñando también el respeto a los seres humanos, a las personas y, por supuesto, a los hombres y a las mujeres.

Abrir espacios para la reconciliación social, el perdón y la reparación de ser posible.

Sin perdón no hay futuro, pero sin confesión no puede haber perdón.

¿Quién es una persona que maltrata psicológicamente?

La VIOLENCIA es la expresión de la prepotencia y esto es la potencia de los impotentes.

Detrás de cada violento hay siempre alguien que tiene un problema de su valor, de aquello que puede y sabe.

  • – Primero te seducen, te encandilan, te hacen sentir única, ideal y perfecta.
  • – Controla tu vida, tu ropa y tu actuar (qué haces, dónde estás, con quién).
  • – Desvaloriza tus opiniones y sentimientos. Culpa y manipula.
  • – Te humilla, te denigra, te menosprecia, de forma gradual y crees que no mereces, que debes estar agradecida y sin él no serías nada.
  • – Sientes vergüenza mezclada con rabia, sin poder hacer nada.
  • – No te dejo ver a tus Familiares o amigos (para que no hablen mal de él).
  • – Revisa llamadas, msj y redes.
  • – No te deja estudiar y menos trabajar para controlar con el dinero.
  • ¡Lo hago porque te quiero, Tienes suerte de tenerme a tu lado! son algunas de sus frases favoritas

¡Cuidado! Este contenido es como el oro: ¡no se puede duplicar!