El ataque se produjo en la provincia de Nong Bua Lamphu, en el noreste de Tailandia. El agresor mató luego a su familia y se suicidó.
Tailandia .-Al menos 35 muertos-entre ellos 24 niños- murieron después de que un expolicía abriera fuego en una guardería en Tailandia, según confirmaron fuentes de seguridad del país.
El atacante, que la policía identificó como Panya Kamrab, de 34 años, entró en la guardería y disparó y apuñaló indiscriminadamente a niños y adultos antes de darse a la fuga.
La víctima más jóven tiene solo dos años. También hay 12 heridos.
En la guardería se encontraban unos 30 niños. Kamrab llegó al recinto después de la hora del almuerzo y empezó a ponerse nervioso al no encontrar allí a su hijo, según declaró en la primera versión la policía.
Primero abrió fuego “contra cuatro o cinco fucionarios de la guardería”, según explicó una testigo que trabajaba cerca, Jidapa Boonsom, a la agencia Reuters. Una de las vícimas es una trabajadora de la escuela que estaba embarazada de ocho meses.
Al parecer, el exagente había sido despedido el año pasado por consumo de estupefacientes, según la cadena de televisión tailandesa “Thai PBS”.
“Al principio la gente pensaba que eran fuegos artificiales”, dijo Bonsoom. Al parecer, el agresor entró luego en una habitación en la que los niños estaban durmiendo.
Después de esta masacre el asesino se subió a su camioneta y arremetió con el vehículo contra un grupo de personas que caminaban. “Intentaba chocar con otros en la calle. Embistió contra una moto y dos personas fueron heridas
Luego del ataque el autor del crimen huyó hasta su vivienda, donde acabó con la vida de su mujer y sus tres hijos antes de suicidarse, según informaciones del diario ‘Thairath’.
El asesino Panya Kamrab había sido expulsado del Cuerpo de Policía después de verse implicado en un caso de tráfico de drogas.