Majid Reza Rahnavard fue ahorcado en público en la ciudad santa de Mashad, después de ser sentenciado a muerte por el asesinato de dos agentes de seguridad en Irán, informó la agencia Mizan.
Es el segundo preso ejecutado por su participación en las protestas del ese país.
La ejecución de Rahnavard fue publicada en las redes, en un claro mensaje del régimen que lidera el ayatolá Alí Jamenei sobre lo que le espera a los que sigan protestando.
El joven fue arrestado el 19 de noviembre, acusado el 24 y condenado a muerte el 29, en un juicio sumarísimo.
“Fue sentenciado a muerte por “guerra contra dios” por acuchillar hasta la muerte a dos miembros de las fuerzas de seguridad”, aseguró la agencia afín al régimen, que añadió que además hirió supuestamente a otras cuatro personas.