Con la salida de Citi de sus negocios de banca de consumo y empresarial en México, el banco estadounidense los pondrá a la venta bajo la marca Banamex, operación que incluirá sus sucursales, Afore, aseguradora, negocio de tarjetas de débito y crédito; sin embargo, la institución financiera aseguro que sus clientes no se verán afectados por esta decisión y seguirán operando con normalidad.
De acuerdo con el director corporativo de Desarrollo Institucional, Estudios Económicos y Comunicación de Citibanamex, Alberto Gómez Alcalá, como parte de este plan, Citi solicitaría a las autoridades una nueva licencia para operar en el país, mientras que el Banco Nacional de México (Banamex) mantendría la suya.
En este sentido detalló que la firma estadounidense retendrá la banca mayorista, lo que tradicionalmente en México se llama banca corporativa, es decir, mercados, casa de bolsa y el negocio de banca privada global.
“Lo que está en venta es la operación de sucursales, lo que tiene que ver con tarjetas, el negocio de nómina, la cartera hipotecaria, el crédito familiar y empresarial la parte patrimonial, las Afores, la compañía aseguradora y por supuesto todos sus brazos de fundaciones, compromiso social y por supuesto los inmuebles”, precisó.
En este sentido, Gómez Alcalá expuso que una vez que esté culminada la transacción, serían dos entidades distintas, por eso Citi necesitaría una nueva licencia para operar, ya que la transacción incluye las licencias y la marca, pero Banamex es una marca muy importante y reconocida.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Grupo Financiero Citibanamex es el tercero más grande que opera en México, con un total de 1 billón 433 mil 851 millones de pesos.
Además, los datos de la CNBV indica que hasta el mes de noviembre del año pasado, Citibanamex contaba con un total de 1,276 sucursales bancarias, 9,012 cajeros, 7 millones 168,038 tarjetas de crédito, 209,373 de débito, así como 31,406 empleados.
¿Qué pasará con sus empleados y clientes?
De acuerdo con Alberto Gómez Alcalá, no habrá ninguna afectación para los colaboradores actuales de Citibanamex, mientras que la operación cotidiana del banco sigue, ya que la instrucción es que ningún cliente se vea afectado.
“El objetivo último es el que aquí nadie se vea afectado, los clientes van a seguir siendo atendidos normalmente, cotidianamente, sin que pase nada y es un objetivo prioritario para nosotros que nadie se vea afectado a sus operaciones normales”, detalló.
De acuerdo con el directivo, los clientes que tengan una hipoteca, tarjeta, etcétera, seguirán siendo atendidos, ya que lo que se vende es esa parte con la marca del Banco Nacional de México y Citi se queda con la parte de clientes institucionales.
Una vez que ocurra la venta, la mayoría de los empleados se quedarían en Banamex y Citi solo mantendría una parte relativamente pequeña.
Asimismo, reiteró que la decisión no tiene nada que ver con algún tema ligado a las perspectivas económicas de México; al contrario, mantienen una visión optimista y siguen viendo al país como una economía altamente competitiva, sujeta a flujos de inversión que van a continuar y que tiene oportunidades muy interesantes por la coyuntura contemporánea del mundo, de forma que Citi mantendrá sus programas de inversión.