La crisis aérea derivada del cierre de gobierno en Estados Unidos alcanzó un nuevo punto de alarma la noche del viernes en el Aeropuerto LaGuardia de Nueva York, donde dos aviones comerciales de United Airlines colisionaron en la pista sin que se registraran heridos, informaron las autoridades.
El incidente, ocurrido al cierre de una jornada marcada por el viento y la escasez de controladores aéreos, subraya la creciente preocupación sobre la seguridad operativa durante la falta de personal federal.
Incidente en pista
El percance involucró a dos aeronaves de la misma compañía:
- El vuelo 580 de United Airlines, que acababa de aterrizar procedente de Chicago, colisionó con la cola del segundo avión mientras se dirigía a su puerta de llegada.
- El vuelo 434 de United Airlines, que se encontraba detenido en pista, a la espera de recibir autorización para despegar con destino a Houston, fue el impactado.
El choque, que afortunadamente solo causó daños materiales menores, obligó al desembarque inmediato de todos los pasajeros de ambas aeronaves y supuso la cancelación definitiva del vuelo con destino a Texas.
Cierre de gobierno y escasez de controladores
Las autoridades señalaron que este incidente se produjo en medio de un día caótico en los aeropuertos neoyorquinos.
La falta de personal en las torres de control debido al cierre de gobierno federal ha provocado interrupciones y retrasos masivos. Tanto el aeropuerto doméstico de LaGuardia como el internacional John F. Kennedy (JFK) tuvieron que suspender temporalmente los despegues de aeronaves durante el día ante la crítica escasez de controladores.
El incidente de United Airlines intensifica las críticas hacia el estancamiento político que ha dejado a personal clave, como los controladores aéreos, trabajando sin recibir sueldo, lo que ha generado una gran inquietud sobre la seguridad y el funcionamiento del tráfico aéreo nacional.
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