Buscan certificación “Punto Limpio”, 30 escuelas particulares

Gabriela García

El sector de las escuelas particulares en Puebla busca obtener el sello de calidad “Punto Limpio”, que otorgan las Secretarías de Salud y Trabajo a las empresas que cumplen con los protocolos de sanidad y calidad para ofrecer servicios.

En entrevista, el presidente de la Federación de Escuelas Particulares de Puebla, Arturo Guerra Bedolla, señaló que son al menos 30 instituciones las que podrían obtener la certificación, de las 75 que agrupa el organismo.

Declaró que buscan un acercamiento con las autoridades de la Secretaría de Educación para presentarles una propuesta de protocolo de seguridad sanitaria que deberán aplicar las escuelas para la Nueva Normalidad.

En este sentido, detalló que están planteando varias alternativas, como un modelo híbrido de educación, la forma de interactuar de manera presencial sin perder la sana distancia y acciones compensatorias para abatir el rezago educativo.

Guerra Bedolla añadió que desde hace algún tiempo las escuelas particulares han formando Comités de Seguridad, donde cuentan con un equipo de asesores en la materia, que las han estado apoyando en la implementación de los protocolos de salud.

“Estamos capacitando a las personas de limpieza para lograr que los planteles sean lo más seguros posible, entonces está la certificación de “Punto Limpio” que ha impulsado desde hace algunos años la Secretaría de Turismo, que ya avalaron las Secretarías de Trabajo y de Salud, y que nosotros buscamos que también avale la Secretaría de Educación para que los colegios puedan certificarse y garantizar que son lugares seguros”, comentó.

El representante de este sector se mostró contento con el anuncio del gobierno del estado del posible regreso a las aulas en agosto. Lo anterior, al señalar que, aunque han tenido que aprender a operar de forma virtual y a distancia, la escuela realmente funciona de manera presencial.

Sin embargo, reconoció que hay padres de familia y docentes que no se sienten del todo seguros de regresar a las actividades presenciales, por temor a contagiarse, de tal manera que prefieren que el tema de salud esté mejor para retornar al sistema.

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