Dos presuntos responsables de la fabricación de drones bomba quedaron libres luego de que una jueza descartara las pruebas en su contra. Se descartaron 11 de las 13 pruebas que se había presentado en su contra. La jueza consideró que fue ilegal la inspección que realizó un agente de la FGR en la casa de seguridad donde encontró explosivos C-4 y drones.
El pasado 24 de abril de 2020 la investigación de la FGR los llevó a un domicilio en San Pedro, Cholula en Puebla, donde detuvieron a dos jóvenes que adaptaban drones para usarlos como explosivos. El tío de uno de los jóvenes era quien les rentaba el inmueble y voluntariamente aceptó abrir las puertas a los investigadores. Cuando el agente encontró materiales sospechosos, regreso al día siguiente con una orden judicial y decomisaron y detuvieron a los jóvenes.
Sin embargo, la jueza considero que esto era un cateo simulado, ya que la primera vez que encontró evidencias no se contaba con una orden de cateo. Por este motivo 11 de las 13 pruebas fueron descartadas. Se pedía originalmente que se les diera 30 años por la posesión de explosivos y armamento, pero al descartar la mayoría de las pruebas solo se le dejaron cargos por posesión de armas y cartuchos que fueron encontrados en otro domicilio. Actualmente los jóvenes se encuentran detenidos en el penal de San Miguelito aquí en Puebla, pero solo enfrentan pocos cargos. Aún no se sabe si la FGR impugnará la decisión de la jueza.