El cantante Alejandro Fernández hizo historia frente a 50 mil fans que abarrotaron la Monumental Plaza de Toros México, reviviendo la hazaña de su padre Vicente Fernández en 1984.
Tras una lluvia, que recordó el día que el Charro de Huentitán conquistó el recinto, El Potrillo se hizo presente en el escenario a las 21:45 horas del sábado.
“Como mi padre en aquel concierto, dejaré la piel, el alma, el corazón y la vida para que la música mexicana se escuche hasta el cielo”, dijo tras iniciar canciones de inicio de su carrera, éxitos y un homenaje a su padre.
Durante dos horas y media, Alejandro Fernández deleitó a los asistentes e invitó a su hijo Alex Fernández a cantar dos temas, quien más tarde le dio la noticia que sería abuelo de su segundo hijo.
Alejandro Fernández al final de la presentación cambió su vestuario a un traje de charro en color mostaza, igual al de su padre Vicente Fernández en el emblemático concierto que lo consagró como un ídolo.