Thalía Becerra
Estudiantes de la IBERO Puebla han desarrollado una herramienta terapéutica para apoyar el desarrollo cognitivo y la integración social de niños con trastornos mentales.
El proyecto OTOH busca transformar el juego en una plataforma accesible para infantes que padecen de condiciones como el déficit de atención (TDAH) o el autismo.

Estrategia inclusiva y enfoque terapéutico
El juego se centra en promover un aprendizaje inclusivo que fortalezca las funciones cognitivas, conductuales y emocionales a través de la experimentación sensorial y actividades basadas en el equilibrio.
El proyecto ha sido probado en niños con trastornos del neurodesarrollo, demostrando una mejora tangible en sus habilidades de concentración, memoria y destrezas sociales.

Los tres desafíos de OTOH
OTOH se compone de tres tableros principales con un desafío específico:
- Gibo: Requiere que el usuario acomode y rote cuatro discos con masas desiguales, buscando mantener el equilibrio de una pelota central. Este ejercicio estimula directamente la atención y la coordinación.
- Piko: Consiste en colocar 12 piezas de diferentes pesos sobre una media esfera, poniendo a prueba la concentración y la estabilidad.
- Olie: El jugador debe ensamblar 22 piezas de distintas formas y tamaños para completar una figura esférica. Esta actividad fomenta la habilidad para resolver problemas y la regulación emocional.
Con este proyecto, la IBERO Puebla reafirma su compromiso con la creatividad, la empatía y el rigor técnico para mejorar la calidad de vida de los niños y construir una sociedad más inclusiva.
Noticias Puebla Anuncian la Ruba Race Puebla 2025 con causa social
